La obra de Moria es tan mala que algunos piden la devolución de la "plata" que abonan para verla.
Arrancó con buen caudal de entradas vendidas, casi 300 en cada función, lo que muestra un interés por parte del publico. Pero no todo fue alegría: los empleados del teatro tuvieron que soportar que después de las funciones del jueves y del viernes una gran cantidad de público se dirigiera a la boletería para pedir que se les reintegrara el importe abonado porque la función "les había parecido un desastre".
No hay comentarios:
Publicar un comentario