Pero todo terminó en un verdadero escándalo. Resulta que los hermanitos ingresaron a la cancha pero nunca fueron ubicados en el palco que debían estar ya que estaba ocupado.
A Charlotte y Alexander los hicieron pasear por todo el interior de la cancha, buscando el lugar que supuestamente tenían asignado y finalmente se retiraron caminando por el barrio de La Boca bajo la intensa lluvia, lo que provocó la furia de la rubia.
Charlotte, con altos tacos caminando por el barro, escupió la camiseta de Boca, la arrojó al piso y se subió a su auto insultando a todos las personas que se cruzaban por su camino.
“Me voy de esta cancha de mier… Me voy a la de River que me tratarán mejor”, habrían sido algunas de las frases que disparó Charlotte.
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